Hola, otra vez
nos encontramos, sabes mi trabajo no es el más fácil, pero es lo mejor que me
ha pasado.
Escogí ser maestra porque
me gusta estar rodeada de alegría, energía,
talento, creatividad, humor, nobleza, solidaridad, esperanza, sueños, retos, metas,
cariño, e inocencia. Tus compañeros y tú
son un manantial de todo eso, cuando me sumerjo en su mundo me renuevo, mi
creatividad se dispara, ustedes me mantienen activa y vivaz… ¡que privilegio!
, este trabajo siempre nuevo, diferente, siempre en búsqueda de estrategias, de
medios para ayudarte, guiarte en tu misión de aprender.
No te voy a mentir,
hay momentos que siento que no logro siquiera atraer tu atención y para colmo
veo en tus ojos ira, entiendo que a
veces no es hacia a mí, pero termino siendo el recipiente de tus frustraciones,
miedos, acorralamientos y algunas veces “mala crianza”, fea expresión, pero
cierta es... al menos para mí.
Llegaste al
aula con un maravilloso equipaje ,repleto de tus dones y talentos, pero también
con una que otra actitud oscurecedora de tu brillo; es normal, somos
luz y sombras y es mi misión ayudarte a mantener tu brillo y es ahí cuando a
veces recibo de ti oscuridad, me percibes
como la que estorba, la que no te deja “ser”, aborreces o al menos no
aceptas las normas, pero querido estudiante son necesarias para todo en la vida.
No quiero abrumarte
con tantas palabras, vamos , te invito, caminemos y aprendamos juntos, baja tus armas,
extingue el fuego en tu boca.
Cuando un volcán
expulsa su lava pierde altura, porque su
cráter se desmorona y su fluir ardiente destruye
todo a su paso.
Escucha, te visiono siempre erguido , esperanzado,
construyendo “ahoras” dignos de recordar, “ahoras” que gestaran “mañanas” mucho
mejores… ¡brilla mi querido estudiante, brilla! … aquí estoy siempre con las
manos extendidas, siendo tu profe…
ARChG
ARChG
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