A MI AMIGO...

Mi incondicional, que lloras por mi llanto y te alegras por mis alegrías, que a pesar de que muchas veces no nos entendemos, eres uno conmigo cuando estoy en dificultades, que me haces reír cuando no tengo ganas y me levantas cuando no tengo fuerzas.
Largo camino hemos recorrido mi amigo, más que compañeros, aliados tú y yo, mano a mano, hombro a hombro, sosteniéndonos uno al otro, mi confidente, mi faro, esa luz siempre encendida para mí.
A ti mi gran amigo, mi gran amor, el enigma que a veces me atormenta… ¿Cómo amarte tanto y al mismo tiempo encontrarte tan irritante cuando me dices lo que no quiero escuchar? ¿Cómo no amarte, si me  amas tanto? ¿Cómo no amarte si hay tanto de ti en mí?
Tan diferentes, tan iguales tu y yo, disgustados algunas veces, pero siempre fieles, leales uno al otro, amigos a final de cuentas, amigos por siempre…
A ti mi gran amigo ¡Gracias!   Más que mi padre eres y siempre serás  mi mejor amigo .
                                                                                                                           Ana R.