Por casualidad me encontré con esto...
sábado, 24 de agosto de 2019
lunes, 1 de julio de 2019
La maltrecha dignidad del docente…
Googleando , con la intención
de “darle sentido” a este peculiar
estado de ánimo que me abrumó en los días previos a la salida de vacaciones
estudiantiles de mitad de año , me
encontré con las palabras de Inger Enkvist :
La respuesta es una sola: en la medida que seamos menos éticos, menor será el ejercicio de los llamados valores humanos y predominará entonces lo opuesto, la violencia en sus múltiples manifestaciones.
“…Se cargan sobre la espalda del profesor todos los problemas sociales,
y se espera que el profesor haga también las veces de asistente social y
policía. Esto es pedir demasiado al profesor.”
"…Se necesitan maestros con más autoridad
que no acepten perder el tiempo en tonterías en el aula"
“La nueva pedagogía es un error. Parece que se va a la
escuela a hacer actividades, no a trabajar y estudiar”
“…un cansancio que tiene mucho que ver con que los alumnos no se comportan siempre
como alumnos”.
La verdad poco conozco de esta
pedagoga, pero sus reflexiones no me resultan indiferentes, encuentro en ellas algunas
coincidencias con mi percepción actual
de lo que han llamado el complejo fenómeno de la educación .
Antes de continuar, dejo de
manifiesto que la concepción de Freire
respecto al educando y su universo de implicaciones, se constituyó hace muchos
años en un referente para mi quehacer docente y no me averguenzo de ello,aunque en esta paleta de opiniones , modelos,enfoques y demás "parafernalia" pedagógica,al menos un alma lo considera muy romántico,utópico y una imagen inflada del niño y sus potencialidades .Por lo inmediatamente anterior vale la pena esta aclaración , porque quizás a alguno pudiera parecerle
inconcebible estar de acuerdo con
dos posturas tan diferentes respecto al estudiante . Sin embargo en mi opinión,
no están en los extremos opuestos del espectro educativo, antes bien lo que no
manifiesta Enkvist acerca de la
pedagogía de Freire, es que según Dussel, la pedagogía de Freire es una
pedagogía que propone el surgimiento de
una conciencia ético-crítica y tal cómo lo esbocé en mi reflexión anterior,
estamos fallando como sociedad, no estamos formando éticamente a
nuestros niños, niñas y adolescentes. Es imperativo que los guiemos en su
trayecto hacia la construcción de su humanidad, es decir a ser personas éticas.
En ese esfuerzo encontramos entonces,
que la familia , que es la primera
formadora está en crisis. La corrupción está
en aumento, evidenciándose en cada uno de los sectores que conforman la
sociedad y pareciera que se le ha delegado exclusivamente al sistema educativo
la quijotesca tarea de formar personas éticas y en este punto entiendo algunas expresiones de Inger Enkvist...
Cada docente en algún momento del ejercicio de su vocación ha sentido “ese cansancio” y me atrevería a agregar
que también ha sentido la soledad, el abandono, la incomprensión y hasta la violencia
por parte de sus estudiantes, de los padres de familia, de sus directivos y de
las autoridades educativas.
En cuanto a lo que ella llama pérdida de autoridad del docente, me atrevo a plantearlo así, la autoridad está ahí lo que ocurre es que no es reconocida, al igual que no se reconoce la autoridad de otros servidores públicos, entre ellos agentes de policía y tránsito. ¿Pero por qué ocurre esto?
La respuesta es una sola: en la medida que seamos menos éticos, menor será el ejercicio de los llamados valores humanos y predominará entonces lo opuesto, la violencia en sus múltiples manifestaciones.
Si los menores de edad no
adquieren y desarrollan “competencias humanas” específicamente las del ser –competencias
ciudadanas-, el caos será la constante.
Mucho se habla de la prevalencia de los derechos
de los niños, niñas y adolescentes , está
en boga y con justa razón, es nuestra misión promover, salvaguardar, difundir,
aplicar y defender estos derechos, ¿pero qué hay acerca de los deberes
que los menores deben asumir en función de ser parte de la sociedad? Es quizás esta
dicotomía lo que ha llevado a Inger
Enkvist a pronunciarse acerca de “…que
se requiere de más esfuerzo de los estudiantes. Reglas de conducta y de
rendimiento escolar más claras. Quizá ni siquiera es más esfuerzo sino solo más
orden”.
Particularmente
considero que dentro de ese orden es necesario que el alumnado conozca la ley.
En nuestro país un menor de 14 años
cumplidos es responsable penal, entonces
a esa edad ya debe conocer por lo menos el código de policía, tal
desconocimiento contribuye en alguna medida al irrespeto a la autoridad,
cumpliéndose aquello que la ignorancia es atrevida.
Es
necesario también, que los alumnos y sus padres y/o acudientes sean informados acerca de la normatividad vigente en lo concerniente a las
agresiones
hacia servidores públicos , y que los directivos docentes y las instancias responsables de
servicio educativo, implementen acciones conducentes al restablecimiento de los derechos de los docentes afectados.
Sin
parecer arrogante, afirmo que la
sociedad colombiana está en mora con el
merecido reconocimiento hacia la labor del maestro y más últimamente, cuando más de un padre de la patria ha arremetido contra su quehacer.
Es justo entonces que al menos se intente
valorar las funciones docentes con otros ojos .
Yendo un
poco más lejos ¿será que en Colombia urge revisar el currículo y darle mayor énfasis
a la formación del ser?... Lo digo por
aquello de la pérdida de valores y el debilitamiento de la sociedad, situación
que reiteradamente todas las instituciones gubernamentales y fuerzas
vivas del país ponen de manifiesto y que
en respuesta algunas regiones están
implementando talleres y actividades tendientes a “construir ciudadanía”.
Actividades diseñadas
y ejecutadas por entidades privadas especializadas en el tema, que aparecen en
algunas instituciones, “cumplen su derrotero”, entregan certificados y como decían
las abuelas “Adiós luz que te guarde el cielo”.
Creo que
la formación de la persona
humana tiene que ser contextualizada,
sistemática, global, coherente y
progresiva, acorde a los niveles
de desarrollo del niño y extenderse a
su entorno
próximo .Grande es el reto pero considero que no hay de otra, sí queremos
que la persona humana prevalezca.
sábado, 29 de junio de 2019
Ocurrió en Argentina
Alguien ya habla de la involución del ser humano, moral tenemos todos,
pero la ética, supuesto atributo o habilidad única del ser humano, no todos la
tenemos y he ahí el detalle.
En Japón, según dicen forman al niño
éticamente, luego que evidencia desarrollo en sus competencias “humanas”,
entonces se inicia el aprendizaje de lo demás.
Ojalá se le diera prioridad a la formación del ser.El humano es el único animal al que hay que enseñarle a “ser”. Los demás animales son lo que son, nacen “siendo” y mueren “siendo”.
Ojalá se le diera prioridad a la formación del ser.El humano es el único animal al que hay que enseñarle a “ser”. Los demás animales son lo que son, nacen “siendo” y mueren “siendo”.
El humano nace sin “humanidad”,
aclaro, su esencia o identidad como criatura humana requiere un proceso de
enseñanza- aprendizaje, lástima que creamos lo contrario y dejamos
que la inercia se encargue y tristemente los resultados saltan a la vista.
FUENTE DE INTERNET:https://www.minuto30.com/cuatro-ninas-de-11-anos-violaron-a-una-nina-de-7-en-pleno-bano-de-un-colegio/849871/
Te puede interesar: Tutela que afirma que los menores de 12 años no están obligados a dar testimonios juramentados y que en primera instancias sus palabras respecto a abusos contra ellos cometidos, deben considerarse veraces y darán pie a inicio de investigaciones y seguimiento de procedimiento legal respectivo. También hace mención de la prevalencia de los derechos de los menores respecto a los derechos de los demás miembros de la sociedad colombiana.
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